José María «Pecho» López: puta madre, no quería aflojar

Casi entrando en la recta final de las elecciones municipales del 27 de agosto, el candidato a intendente de Unidos por Río Tercero, José María “Pecho” López se despidió hoy martes 8 de una manera inesperada de un programa radial. SIGUE ABAJO

Visiblemente conmovido, el candidato dejó ver su interior con una frase que desnudó del modo intenso que viene transitando esta campaña electoral. Pecho venía de un domingo complicado, en el que no pudo asistir a un acto partidario en un salón colmado de público femenino, en el que estuvo presente la ministra de la Mujer, por haber sufrido una descompostura que lo alertó. El estrés que carga una campaña electoral, no es fácil de administrar. SIGUE ABAJO

López brindó una extensa entrevista al programa “Las moscas no pagan peaje” que conduce Victoria Ghiano por Zoila Radio, en la que habló desde su nacimiento en la provincia de Buenos Aires, pasando una época como empresario de la noche de Río Tercero y luego todo el camino que lo llevó a ser un importante empresario de la agroindustria nacional. SIGUE ABAJO

Su crecimiento empresario fue como apostando a un todo o nada, arriesgando mucho más de lo que cualquiera haría cuando se encuentra en una etapa de cierta estabilidad y confort en la vida.
Saltos de un trabajo a otro, firmas de garantías millonarias en dólares, charlas mano a mano con los principales políticos del país, todo formó parte de su crecimiento empresario. SIGUE ABAJO

La entrevista transitó por esos momentos vertiginosos y de suspenso por otros románticos, de reflexión, sensibles.
Nada se hablaba de política, quizá sospechando la conductora que la nota iba a tener otro remate. SIGUE ABAJO

Pecho habló de un hijo con el que tuvo contacto 12 años después de haber nacido, al que hoy considera su “fotocopia” y que es más que su mano derecha en la fábrica de tractores Pauny que dirige junto a otros socios. SIGUE ABAJO

Habló de su esposa Mabel, con una carrera de arquitectura puesta en pausa antes de hacer la tesis para dedicarse al cuidado de sus hijos, Gaspar, Tamara, José María y Juan. SIGUE ABAJO

Sus dos hijos mayores le dieron cuatro nietas, dos cada uno.
Entonces, cuando el final del programa se precipitaba y cuando se esperaba que finalmente López dijera “ser intendente de Río Tercero” ante la última pregunta de la periodista referida a qué le faltaba en su vida, se produjo un intrigante silencio. Hasta se pudo sentir que López tragó, mientras la pausa atronaba. SIGUE ABAJO

López, ahogado en llanto, dijo: “espero un nieto varón, eso espero”. El silencio se adueñó nuevamente del aire. Ni la periodista volvió a hablar para despedirse. La audiencia pudo haber imaginado que se paró para darle un abrazo.
“Puta madre, no quería aflojar”, fue lo último que se escuchó mientras los micrófonos se iban silenciado.