Encontraron a un náufrago que vivió tres meses a la deriva en el Océano Pacífico
Timothy Shaddok, un marinero australiano, acaba de aparecer en medio del océano luego de tres meses desaparecido. Su plan de navegar más de 6.000 kilómetros se vio interrumpido tras perder el rumbo y quedar a merced de una tormenta: debió alimentarse con pescado crudo y tomar agua de lluvia para sobrevivir. SIGUE ABAJO
Aun después de todo ese periplo, el australiano se encuentra muy bien de salud. Shaddock tenía síntomas de deshidratación e insolación, aunque en los videos difundidos mostraba un buen humor tras su desventura. SIGUE ABAJO
Sobrevivió gracias a la suerte y a su habilidad, pero también gracias a que tuvo la acompañante perfecta. A bordo del barco que lo rescató, contó su historia.
En abril de este año, Thimothy Shaddok, de 51 años, partió del puerto de La Paz (Baja California Sur) con la idea de navegar las aguas del océano Pacífico junto a su perra, Bella, y llegar a la Polinesia Francesa. Más de 6.000 kilómetros a bordo de un motovelero, una embarcación que mezcla las características de un crucero y un velero. SIGUE ABAJO
Sin embargo, apenas unas semanas después del comienzo del viaje, fueron golpeados por una tormenta que paralizó su embarcación. Así, entregados a su destino, Timothy y Bella flotaron sin rumbo en la inmensidad del océano. Solo se tenían el uno al otro. SIGUE ABAJO
Para sobrevivir, Shaddock recurrió a juntar agua de lluvia y a comer pescados crudos. La dieta de Bella, como no podía ser de otra manera, fue la misma. Pasaron sus días esperando, con una esperanza de ser rescatados que se hacía más difusa con cada anochecer. SIGUE ABAJO
Sin embargo, la suerte que lo hizo naufragar fue la misma que lo salvó. Un barco atunero de Manzanillo (Colima), de nombre María Delia, se había salido de su ruta original cuando divisó a lo lejos a un motovelero con una perra y un hombre barbudo y haraposo a bordo. Eran Shaddock y Bella, tres meses después de haberse perdido. SIGUE ABAJO
Cuando lo encontraron, Shaddock tenía “signos vitales normales”: “Está estable, se está recuperando muy bien”, confirmó el médico que le brindó atención tras el rescate al canal 9News de Sydney. “Estoy muy bien de salud”, dijo el náufrago poco después. SIGUE ABAJO
“Pasé por una prueba muy difícil en el mar. Solo necesito descansar y comer bien porque estuve solo en el mar por mucho tiempo. Por lo demás, estoy muy bien de salud”, insistió Shaddok. SIGUE ABAJO
El profesor Mike Tipton, un experto en supervivencia en el océano, dijo al medio australiano que fue “una combinación de suerte y habilidad” la que salvó a Shaddock. En este sentido, destacó que “saber, por ejemplo, como lo hizo Tim, que durante el calor del día necesitas protegerte porque lo último que quieres cuando estás en peligro de deshidratarte es transpirar”, fue muy importante. SIGUE ABAJO
“Si miras hacia atrás en la historia, tienden a ocurrir en ambientes cálidos porque si era un ambiente frío, no sobrevives lo suficiente”, reflexionó Tipton. Sin embargo, remarcó que fue una situación de “aguja en un pajar”. “La gente necesita apreciar lo pequeño que es el barco y lo vasto que es el Pacífico. Las posibilidades de que alguien sea encontrado son bastante escasas”, analizó.
“Creo que tener a Bella a bordo bien puede haber marcado la diferencia”, afirmó Tipton a 9News. “Estás viviendo mucho día a día y tienes que tener una actitud mental muy positiva para superar este tipo de calvario y no rendirte. Pero también, tener un plan, racionarte en términos de agua y comida, es realmente el secreto para largos viajes de supervivencia. Imagínate lo oscuro y solitario que se sentiría ahí fuera durante la noche”, agregó.
Ahora, de cara a lo que viene, Shaddock necesitará volver lentamente a una dieta normal. “Tiene que ser un regreso lento a la normalidad y probablemente será necesario vigilarlo durante varios meses”, cerró el experto. Shaddock es, ahora, uno de los náufragos del siglo XXI.
En enero de 2014, el náufrago salvadoreño José Salvador Alvarenga fue rescatado en Islas Marshall tras sobrevivir unos 13 meses en alta mar a base de comer carne cruda de aves y pescados, y bebiendo sangre de tortuga, sus propios orines y agua de lluvia.