Inflación en ascenso en Córdoba – En septiembre fue del 2,4% y fue el peor mes del año en ventas

La inflación en Córdoba fue en ascenso durante el mes de septiembre y para el Centro de Almaceneros resultó el quinto mes consecutivo en el que registra una suba.

Para esta institución la inflación de septiembre fue del 2,43%, escalando con el siguiente ritmo desde abril (3,4%): mayo (1,7%); junio (1,8%); julio (1,9%); agosto (2,2%) y ahora septiembre con 2,43%.
El titular de la entidad, Germán Romero, explicó que ese índice es “haber vuelto en cuanto a materia inflacionaria a los meses de marzo, abril, o fines del año pasado”.
El dato sobresaliente de Almaceneros es que el mes pasado fue “el peor del año” en ventas en comercios de cercanías, con una caída del 9,3% interanual.
Romero señaló que se esperaba que la inflación superara nuevamente el dos por ciento porque la canasta de alimentos tuvo una suba de 2,6%. Detalló que tuvieron subas principalmente lácteos, un siete por ciento y harinas, farináceos, 5%, además de aceites, sal, fiambres, gaseosas y cervezas.

Para la entidad, la suba de precios “refleja, en gran medida, la volatilidad cambiaria, la presión ejercida por la incertidumbre electoral y la elevada inercia inflacionaria, tan propia de la economía argentina”.
“Hoy tenemos una inflación acumulada en los nueve meses transcurridos del 2025, de 22,6%, una inflación interanual del 33%, que estimamos va a cerrar el año con ese número, 32, 33%”, precisó Romero.

CANASTA BÁSICA TOTAL Y ALIMENTARIA
La canasta básica total para una familia de cuatro integrantes alcanzó en septiembre 1.573.000 pesos y la canasta alimentaria para no caer en la indigencia 834 mil pesos.
INDICADORES SOCIALES
En relación a la situación social, el relevamiento indicó que el 58% de los hogares cordobeses no logró cubrir la Canasta Básica Alimentaria (CBA). Entre quienes sí lo consiguieron, un 71% dependió de la ayuda estatal, a través de programas como la AUH, la Tarjeta Alimentar y planes provinciales.
El informe también expuso que en el 50,7% de los hogares al menos un integrante eliminó alguna comida diaria, siendo la cena la más afectada.