El voto no es impune

OPINIÓN – POR RODOLFO LEMOS

El acierto o error al votar dirigentes se evalúa mirando los resultados morales y materiales en un pueblo. Rectitud es lo contrario a tortuoso, serpenteante.
Decimos que alguien es una persona recta, para referirnos a una biografía con una línea de conducta.
Si bien los movimientos tácticos son admisibles y necesarios, el abuso de maniobras tácticas genera una total desconfianza hacia el “maniobrero”. SIGUE ABAJO

La ausencia de valores innegociables es mal síntoma. La vida en comunidad implica que existe un “crédito social” que acompaña nuestro nombre, y que implica para quienes interactúan con nosotros, que saben a qué atenerse. SIGUE ABAJO

Conocen nuestra vida e incluso ante una acusación falsa, pueden decir “Fulano sería incapaz de hacer algo así”. Y en otros casos, damos una triste advertencia diciendo “Mengano es capaz de cualquier cosa”. Un significante vacío.
Los países también tienen una reputación, que como siempre ocurre, se construye lentamente y se destruye rápido. SIGUE ABAJO

Argentina, luego de los horrores del terrorismo de estado de la dictadura de Videla, con los juicios a las Juntas, y la incorporación a la Constitución Nacional en 1994 de numerosas convenciones de derechos humanos, se hizo acreedora de una justa reputación de defensora de los derechos humanos. SIGUE ABAJO

Si Argentina hoy disimula violaciones de derechos humanos en Venezuela o Nicaragua, pierde su reputación. Si en Nicaragua está presente el asesino iraní del atentado de AMIA, terrorista, prófugo de Interpol, y nuestro embajador nada dice, estamos en un problema serio. Si Argentina a través de su representante máximo, proclama su admiración pública por dos dictaduras como Rusia y China, estamos en problemas. SIGUE ABAJO

Yrigoyen decía “los hombres deben ser sagrados para los hombres y los pueblos deben ser sagrados para los pueblos”, afirmando una doctrina argentina secular de continua defensa del derecho a la autodeterminación de los pueblos.
Hoy Argentina decide visitar y elogiar con deleite al agresor, en medio de un cerco asfixiante contra Ucrania (ya despojada de Crimea en 2014). La misma Argentina que con San Martín, conquistó la libertad propia y de dos países hermanos, ahora obra al contrario. SIGUE ABAJO

El Presidente ofrece nuestra Argentina a un dictador sin más ideología que el imperialismo ruso, y también se ofrece a colaborar en el sometimiento de sus hermanos de Latinoamérica. Cuba, ya fue puerta de entrada al imperialismo ruso, y además de autodestruirse, generó ríos de sangre financiando el terrorismo en Latinoamérica. ¿No te asusta Alberto, que tus palabras se hagan realidad? ¿tu multilateralismo es sin USA y sin Europa? ¿No sería como reemplazar un yugo por otro yugo mucho peor? ¿No te enteraste, Alberto, de que Rusia ya no lucha por el ideal del marxismo y solo lucha por el poder? ¿te da igual que estos países violen derechos humanos básicos? Nadie toma en serio a un traidor sin valores ni convicciones. Rusia y China saben que, si Alberto así habla mal en público de USA, que donó vacunas a la Argentina y viene respaldando sus “renegociaciones” permanentes de deuda desde hace 15 años, esa Argentina traicionará a cualquiera en el futuro.
Mala cosa es una reputación de traidor, en los instantes previos a una posible guerra internacional. Además: un volantazo en política internacional con definiciones de esta magnitud no puede ser decidido sino por el Congreso de la Nación. Incluso, el Congreso debería generar un debate social meditado.
Por muchísimo menos, por tres islas en el Canal de Beagle, Alfonsín tuvo la decencia de llamar a un plebiscito de consulta, para que el pueblo entero decida. Como demócrata en serio, nunca elogió dictaduras. Alfonsín, a quien Alberto mentirosamente dice admirar.
De la Sota decía con acierto: “el pueblo debe saber que el voto no es impune”. Y aunque pocos lo digan, debemos pedir perdón por toda la sangre inocente derramada con apoyo estatal, desde el 30 de diciembre de 2020, con la inicua ley del aborto que debe derogarse.
Rodolfo Lemos Angulo